Otra innovación en la que hemos estado trabajando, precisó Neftali Rojas, son los desecadores solares para el secado de ladrillos, pero sin generar gases de efecto invernadero, ya que no utilizan madera, llantas ni aceite, como se suele hacer.
varias aplicaciones
Se hicieron macetas y jardineras con lo que hacíamos en el instituto, así como bancas, enseres y otros muebles de exterior. Además, con los residuos de la construcción, según Rojas, se colocaron veredas mezcladas con vidrio; incluso después de cinco años de arduo trabajo, todavía están en perfectas condiciones.
A través del uso de residuos de construcción, también se puede formar tierra; “No es necesario triturar, solo seleccione los fragmentos más pequeños”. Del mismo modo, se utilizaron en tecnosuelos.
“En Bordeaux Poniente, donde había un vertedero, colocaron una cama de residuos de construcción, luego plantaron con éxito una cama de compost, que se produce en el lugar, tierra y vegetales varios. También se pueden ver en la Planta de Compostaje de Ciudad Universitaria; allí trabajaron en cooperación con el Instituto de Geología”, dijo.
Con agregados finos de concreto reciclado, continuó el especialista, es posible construir senderos para caminar o andar en bicicleta. “Ya tenemos estudiantes de posgrado en urbanismo que están integrando toda la información recibida para trabajar en los parques de la ciudad de acuerdo con las normas”.
En II también se realizaron muestras de gaviones, que se utilizan para evitar la posible caída de rocas y piedras sobre la superficie de carreteras y vías férreas. En lugar de romper un cerro o usar una roca, podemos aprovechar esta gran cantidad de desechos.
El investigador enfatizó que dado que la rehabilitación crea incluso más que la construcción, se necesitan alternativas viables para reutilizar y reciclar estos materiales. Suelen mezclarse con el resto de residuos y contaminarlos. “Es una actividad encubierta, sin inventario”.